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La peregrinación que dio origen a México

La bandera de México contiene una imagen curiosa: un águila posada sobre un nopal mientras devora una serpiente. La historia detrás de este icono nacional está contenida en uno de los documentos históricos más importantes del continente americano, el Códice Boturini, más conocido como Tira de la Peregrinación.

Así es: el México que hoy conocemos nació de una mítica peregrinación querida y guiada por los dioses, en busca de una señal divina. Los estudios coinciden en que el documento fue elaborado en el siglo XVI, después de la llegada de los españoles, pero basado en fuentes orales y visuales prehispánicas. Posiblemente sea la copia de un códice anterior.

La Tira está compuesta por una larga tira de papel amate un tipo de fibra vegetal muy utilizado por los aztecas. Está dividida en 22 láminas que, al unirse, forman un biombo de aproximadamente 5.49 metros de longitud. A diferencia de otros códices llenos de colores, ésta se caracteriza por sus dibujos en tinta negra.

Gracias a un italiano

El Códice Boturini lleva su nombre en honor al historiador italiano Lorenzo Boturini Benaducci (1702-1755), que llegó a la Nueva España en 1736 para entregar una condecoración papal a la Virgen de Guadalupe. Durante su estancia, quedó fascinado con la cultura mexica, y se dedicó a recopilar manuscritos, códices y otros materiales relacionados con ella.

Tira de la peregrinación
Los Mexicas dejan Atzlan al llamado de los dioses

Este esfuerzo le permitió formar una de las colecciones más importantes de su tiempo, conocida como el «Museo Histórico Indiano». Entre los documentos que reunió, se encontraba la Tira de la Peregrinación. Pero en 1743, fue denunciado y detenido por las autoridades virreinales bajo el cargo de quedarse con material sin permiso.

Su colección fue confiscada y dispersada, y él mismo fue enviado a España, donde redactó su obra más famosa: Idea de una nueva historia general de la América Septentrional, publicada en 1746. Aunque nunca recuperó su colección en vida, su obra contribuyó significativamente al interés por el pasado prehispánico.

La Tira de la Peregrinación es uno de los pocos documentos que se pueden rastrear hasta la colección original de Boturini. De hecho, está incompleta debido a que se fragmentó durante la detención del historiador, y falta la parte final del relato.

Pero ¿qué historia contiene?

El Códice documenta una de las peregrinaciones más emblemáticas de Mesoamérica: el largo y difícil viaje de los mexicas desde Aztlán hasta el Valle de México, donde fundaron Tenochtitlán, en el año 1325 de nuestra era. Un proceso que marcó su historia y su destino como pueblo elegido por Huitzilopochtli, el dios del sol, también conocido como Mexi.

El relato comienza con la salida de los mexicas de Aztlán, cuyo nombre significa «lugar de blancura». Guiados por Huitzilopochtli, emprenden un viaje en busca de un lugar que debería estar identificado por una señal divina: un águila posada sobre un nopal y devorando una serpiente. Esta peregrinación les eleva como pueblo elegido de los dioses.

En la cosmovisión mesoamericana, el movimiento era un principio fundamental del universo. La peregrinación desde Aztlán hasta Tenochtitlán se interpretaba como un reflejo de los ciclos de muerte y renacimiento que regían el universo. Este simbolismo reforzaba la idea de que el destino de los elegidos de Mexi estaba intrínsecamente ligado al equilibrio cósmico.

El códice registra los lugares por los que pasaron, las guerras que libraron y eventos significativos como la elaboración del pulque y la celebración de la festividad del fuego nuevo. Narra también la realización de rituales, que incluían sacrificios humanos, ofrendas y celebraciones. Durante su peregrinación, estuvieron acompañados por otros pueblos, pero enseguida se separaron de ellos para continuar solos, siguiendo las indicaciones de su dios.

La peregrinación de los mexicas no solo fue una búsqueda territorial, sino un proceso de legitimación. Al presentarse como el pueblo elegido por los dioses, los mexicas justificaron su conquista del Valle de México y la creación de su imperio. El acto de peregrinar les otorgaba una narrativa de sacrificio y obediencia divina, que les permitió establecer su superioridad frente a otros grupos.

La importancia de las peregrinaciones en la cultura mexica se extendió más allá de su historia fundacional. Durante el periodo de su imperio, continuaron organizando viajes sagrados hacia lugares por los que había pasado esa primera peregrinación, como el cerro de Chapultepec y Teotihuacán.

Mexico flag
Bandera de México con el águila sobre el nopal devorando una serpiente

El códice en la actualidad

Hoy, el Códice Boturini es considerado un documento auténtico y de inmenso valor histórico. Se encuentra en el Museo Nacional de Antropología en la Ciudad de México, donde ha sido sometido a múltiples estudios científicos y técnicos para garantizar su conservación y analizar su procedencia.

Uno de los elementos más importantes para validar la autenticidad del códice es su correspondencia con otras fuentes históricas y la tradición oral mexica. La narrativa de la migración desde Aztlán, las paradas en lugares específicos, las guerras y eventos simbólicos están documentados en otros textos de esa época, como el Códice Aubin.

La Tira de la Peregrinación no solo relata los orígenes de uno de los pueblos más influyentes de Mesoamérica, sino que también ha desempeñado un papel clave en la construcción de la identidad nacional mexicana moderna. Cuando México se independizó de España, encontró en este mito su identidad fundacional, y lo colocó en su bandera.

Su relevancia trasciende la historia prehispánica, conectando el pasado indígena con el presente, y sigue siendo un símbolo de resistencia cultural, memoria histórica y orgullo nacional. En este documento convergen la mitología, la historia y la identidad, dejando un legado que sigue vivo en el México actual.

The starry message of Guadalupe

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